Tomar decisiones sobre la atención no siempre es fácil. A veces, puede ser que no estemos seguros de qué tratamiento o recorrido es el mejor. Una decisión puede ser aún más difícil si tiene que tomarla en lugar de un ser querido. Cuando hay dudas o desacuerdos, una consulta de ética puede ayudar a la familia a tomar la mejor decisión para todos los involucrados.
¿Qué es una consulta de ética?
Una consulta de ética se hace para que los pacientes y sus familias tomen decisiones mejor informadas sobre la atención. En muchos centros médicos, se ofrece este servicio gratuito a los pacientes y a sus familias a fin de educar y asesorar sobre las opciones de atención más adecuadas. La consulta se puede usar para decidir sobre la atención terminal. También puede ser útil si un ser querido no puede tomar su propia decisión debido a su salud. Por ejemplo, si tiene demencia, sufrió un ataque cerebral o un accidente grave.
¿Qué sucede durante una consulta de ética?
Una persona o un grupo de personas que no participen en su atención ni en la de su ser querido hablarán con todos los involucrados. Les preguntarán a los familiares sobre las inquietudes que tienen. Hablarán con el equipo de atención médica para obtener más información sobre la atención del paciente.
El objetivo del consultor o comité es diseñar opciones de atención que se centren en lo que es mejor para el paciente. Estos consejos pueden facilitar la toma de decisiones y poner fin al conflicto. Durante este proceso, tendrán en cuenta lo siguiente:
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Los objetivos de salud del paciente a corto y largo plazo
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Necesidades, valores y preocupaciones de los miembros de la familia
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Costumbres culturales, religiosas y consideraciones legales de la comunidad
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Experiencia de los proveedores de atención médica
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Privacidad y derechos de todos los involucrados
Si usted y sus seres queridos tienen dificultades para tomar una decisión sobre atención médica, solicite una consulta de ética. Puede servir para tomar la mejor decisión en un momento difícil.
